Había que elegir … o verlo … o sentirlo … y yo me decanté claramente por esto último …
Llegar al siguiente destino nos llevó 10 horas de viaje en autobús … que para nada son tan pesadas como pueden parecer o como podrían serlo en otro tipo de viaje, el cambio constante de paisajes increíbles y totalmente novedosos, las cabezaditas que vas dando (que hoy fueron unas cuantas) alguna que otra conversación y cuando te das cuenta has llegado …
Antes de llegar nos detuvimos en Probolinggo un pueblo que está a unos 45 minutos del sitio al que me dirijo, allí nos explicaron en qué consistiría la nueva “aventura” …
Hay dos formas de hacerlo … o bien lo subes tu sólo, es mucho más fácil que el Merapi, está todo muy bien indicado y sólo te lleva una hora … o bien eliges la otra opción, que te lleven en un jeep a un lugar desde el que se divisa el volcán Bromo más otros dos y desde aquí dicen que el amanecer es espectacular … vi fotos y efectivamente es increíble … Todos los que íbamos eligieron esta segunda opción … todos menos Vigonómada (sí mamá, ya estoy otra vez llevando la contraria a todo el mundo … jejejeje, yo soy así, que quieres que le haga …)
A mi me gusta más sentir que ver … pienso que es más difícil (aunque viendo también se puede sentir y mucho …), por lo que cuando se presenta alguna ocasión no me gusta desaprovecharla … puedo ver las fotos, como ya he hecho pero no puedo sentir sino es por mi mismo … además creo que subir ese volcán a esas horas, puede ser una experiencia que jamás olvidaré … y por supuesto no quiero dejar escapar la oportunidad de comprobarlo … una última consideración … ¿¿y si mañana está nublado?? … decidirme no me llevó ni un segundo, mientras nos lo explicaban lo vi clarísimo …
Una vez decidido todo seguimos el camino hasta los hoteles … llegamos, cenamos y para cama, ahora son las 23 horas, me levanto a las 3:30, es decir, dormiré menos de 4 horas … pero me da lo mismo, ya dormí en el bus y puedo volver a hacerlo mañana, ahora me apetece saborear este momento único, disfrutar del instante previo a una nueva aventura, a un nuevo desafío, a una nueva experiencia … aún sigo saboreando la del Merapi … fue extraordinaria …
Mañana cuando baje os contaré la segunda parte, que tal me ha ido, si lo he sentido y si lo he disfrutado … por cierto, me va a ser mucho más difícil explicaros lo que se siente que lo que se ve, a ver como lo hago ahora que tengo que escribir más despacio y tener cuidado con los adjetivos … según me ha recomendado Retemos ;-) … jajaja, ya os contaré mañana cuantas hora soy capaz de dormir …
Llegar al siguiente destino nos llevó 10 horas de viaje en autobús … que para nada son tan pesadas como pueden parecer o como podrían serlo en otro tipo de viaje, el cambio constante de paisajes increíbles y totalmente novedosos, las cabezaditas que vas dando (que hoy fueron unas cuantas) alguna que otra conversación y cuando te das cuenta has llegado …Antes de llegar nos detuvimos en Probolinggo un pueblo que está a unos 45 minutos del sitio al que me dirijo, allí nos explicaron en qué consistiría la nueva “aventura” …
Hay dos formas de hacerlo … o bien lo subes tu sólo, es mucho más fácil que el Merapi, está todo muy bien indicado y sólo te lleva una hora … o bien eliges la otra opción, que te lleven en un jeep a un lugar desde el que se divisa el volcán Bromo más otros dos y desde aquí dicen que el amanecer es espectacular … vi fotos y efectivamente es increíble … Todos los que íbamos eligieron esta segunda opción … todos menos Vigonómada (sí mamá, ya estoy otra vez llevando la contraria a todo el mundo … jejejeje, yo soy así, que quieres que le haga …)
A mi me gusta más sentir que ver … pienso que es más difícil (aunque viendo también se puede sentir y mucho …), por lo que cuando se presenta alguna ocasión no me gusta desaprovecharla … puedo ver las fotos, como ya he hecho pero no puedo sentir sino es por mi mismo … además creo que subir ese volcán a esas horas, puede ser una experiencia que jamás olvidaré … y por supuesto no quiero dejar escapar la oportunidad de comprobarlo … una última consideración … ¿¿y si mañana está nublado?? … decidirme no me llevó ni un segundo, mientras nos lo explicaban lo vi clarísimo …
Una vez decidido todo seguimos el camino hasta los hoteles … llegamos, cenamos y para cama, ahora son las 23 horas, me levanto a las 3:30, es decir, dormiré menos de 4 horas … pero me da lo mismo, ya dormí en el bus y puedo volver a hacerlo mañana, ahora me apetece saborear este momento único, disfrutar del instante previo a una nueva aventura, a un nuevo desafío, a una nueva experiencia … aún sigo saboreando la del Merapi … fue extraordinaria …
Mañana cuando baje os contaré la segunda parte, que tal me ha ido, si lo he sentido y si lo he disfrutado … por cierto, me va a ser mucho más difícil explicaros lo que se siente que lo que se ve, a ver como lo hago ahora que tengo que escribir más despacio y tener cuidado con los adjetivos … según me ha recomendado Retemos ;-) … jajaja, ya os contaré mañana cuantas hora soy capaz de dormir … 
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